domingo, 23 de agosto de 2009

LAS CELDAS DE CASTIGO 3


LAS CRITICAS: Esta es una de las celdas más socorridas, ya que nadie está libre de sufrir en un instante dado los efectos de una crítica adversa. Existen dos clases de críticas: una es la benévola, discreta, constructiva, hecha con amor y humanidad, y la otra es la crítica ruda, hiriente, malévola y venenosa que lamentablemente es la más común. Toda persona de naturaleza sensible y de carácter íntegro, no puede desentenderse de la crítica adversa ni proceder, como si no existiera. Antes bien, ha de hacerles frente en tres campos: el del sentimiento, el de la razón y el de la práctica. Dominar nuestra reacción emocional es lo que más trabajo nos cuesta. Muy fácil es, por tanto, que despierte en nosotros el resentimiento y la ira. Pero esto sólo nos hace más vulnerables, porque al limitarnos a guardar rencor a quienes nos critican sólo conseguimos envenenarnos. Orad por los que os censuran; bendecid a los que os ofenden, aconseja la Biblia. Puede que esto nos parezca absurdo cuando aún nos escuecen los latigazos de inmerecidas censuras; más tan cierto como asombroso es que el proceder así redunda en alivio de nuestras heridas. Imposible será que al esforzarnos en orar por quienes nos criticaron, cavilemos simultáneamente en la ofensa que nos infirieron.

Otra manera de sosegar nuestros sentimientos frente a la crítica adversa es considerar que a hombres y a mujeres de gran carácter se le ha hecho siempre objeto de censuras. Si hay en nuestra existencia vitalidad alguna; si estamos resueltos a llevar a cabo lo que se debe hacer; y más particularmente , si nos toca señalar nuevos rumbos, nos saldrán al paso la hostilidad y la oposición. Al hombre mas excelso que ha habido en el mundo lo criticaron acerbamente y acabaron por crucificarlo esos contemporáneos suyos para los que eran intolerables las repercusiones de sus ideas renovadoras. El segundo paso para hacer frente a las censuras es el razonamiento. Tomemos nota de ellas para examinarlas objetivamente. Dice un filosofo: "Lo desagradable que digan de nosotros nos deja mucha enseñanza, porque nos hace reflexionar; en tanto que lo bueno que nos digan sólo no da una pasajera satisfacción. Preguntemonos honradamente si la censura que nos ha hecho tiene algún fundamento. Guardémonos de buscar disculpas o justificación a nuestros errores, por ese camino llegaríamos a agravar lo que ya andaba errado. Si nos viéramos forzados a convenir en que nuestro crítico tiene razón, lo más prudente sería manifestarlo así. Esto bastará por si sólo para hacerle callar. Al fin y al cabo ¿Qué otro camino le queda al crítico una vez que hemos convenido en que tiene la razón? Por otra parte, es asombroso cómo se inclina la gente a ponerse de parte del que es capaz de reconocer sus errores.

Otro modo de proceder conforme a razón es considerar qué autoridad tiene nuestro crítico. ¿Es él persona respetable y justa en sus juicios? En tal caso, mal haríamos en pasar por alto sus palabras a la ligera. ¿Hay algún motivo para que él sienta por nosotros rencor o envidia? De haberlo, quizás podamos pasarlas por alto.Un silencio decoroso es a veces la respuesta más adecuada a quien nos calumnia. A veces, desde luego, si las criticas son infundadas, son dañosas a nuestra reputación, debemos refutarlas. Pero al hacerlo, será preferible limitarnos a exponer los hechos, sin buscar el desquite.


Hay algo más a que debemos tener en cuenta, y es la posibilidad de que lo dicho por nuestro crítico llegue a nuestros oídos corregido y aumentado. Porque nunca faltan personas amigas de provocar contiendas, personas siempre listas a echarle leña al fuego. "vamos" le dirán a quien ha sido objeto de censuras... Defiendete!!!


Al hacer frente a la censuras con el razonamiento se llega a otra conclusión: no es posible, para usted ni para nadie, ser simpático a todo el mundo. Así como hay personas que nos son antipáticas sin motivo alguno, habrá otras en las que despertaremos nosotros instintiva antipatía. Tener presente esta sencilla verdad bastará para que no nos preocupe gran cosa vernos rodeados de cierta impopularidad.


La gente que acostumbra a criticar en forma acerba suelen ser sujetos amargados, de ideas confusas, poseídos de un falso concepto de su importancia y que, para disimular la propia incompetencia, no pierden ocasión de hacer hincapié en los defectos agenos. Por último recordar que en toda crítica hay un porcentaje de verdad... aunque sea el más mínimo. Si logramos traspasar el velo del sueño, veremos ese porcentaje, lo que nos permitirá actuar desde otro punto de vista.



LA TIMIDEZ: El tímido es siempre un individuo inhibido , frenado y reprimido que no logra manifestarse ante sí mismo ni ante los demás. Esto lo lleva a experimentar una vida de sufrimientos al ser arrastrado compulsivamente en cualquier instante de su vida a esta celda.
El tímido es un "narciso" en el sentido de ser un tipo enamorado de sí mismo, centrado siempre es su propia persona, vanidoso, orgulloso y de una tremenda consideración interna que lo hace depender en forma total de la opinión ajena. El tímido es siempre agresivo, en el sentido de que ignora a los demás. La gente agresiva no es solamente la que anda diciendo palabrotas o buscando pelear con los demás, sino que sencillamente el que ignora y no pone oídos lo que dicen los demás. El tímido es comodo y flojo, la disculpa que la timidez para indicar que no hacen cosas porque no se atreven y sacar así ventajas de su timidez. Es vergonzoso, porque al ser narcisita se ubica en un nivel muy alto respecto de los demás y no va hacer nada para de alguna manera "bajar"





EL PESIMISMO: Esta es la celda de los que pierden fácilmente la esperanza en un mañana mejor y se dejan abatir por cualquier dificultad. Sin embargo, no debe pensarse jamás que son pesimistas los que tiene la verdad. Esas personas prefieren vivir en la niebla del escepticismo, sufriendo en esta celda, a exponerse a sufrir un desengaño. Además, en cuanto nos decidimos que ya no hay esperanzas, nos atamos de manos; no hay mayor excusa para abandonar la acción y entregarse al negativismo. Todo hermetista tiene la responsabilidad de pensar siempre positivamente, ya que el pensamiento es creativo, es decir, tiende a convertirse en hechos reales. De este modo, los pensamientos habituales que la persona tenga, pueden construirle un futuro positivo o negativo, hacerle enfermar o estar sano; fracasar o triunfar. Nada existe más destructivo y perjudicial que la preocupación pesimista, ya que de acuerdo al principio que "lo similar atrae a los similar", si alguien piensa negativamente en el fracaso, el dolor o la enfermedad, por ejemplo, atraerá inevitablemente hacia si aquello en lo cual está pensando.


Es requisito básico para solucionar cualquier problema en la vida, lograr huir de esta celda del pesimismo y pensar positivamente pase lo que pase. No se trata en ningún caso de ignorar los problemas o de negarlos, ya que eso sería absurdo, sino de enfrentarlos positivamente enfocándolos de otra manera.





LOS CELOS DE PAREJA: Los celos representan una forma de posesión egoísta que tiene por origen un temor obsesivo de que la pareja pueda preferir a otro, y son el producto de una tensión magnética anormal entre los dos polos, representados por el hombre y la mujer, por miedo subconsciente a la indiferencia total. Esta celda es el lugar psicológico más conflictivo y peligroso del mundo interno, puesto que el vampiro que allí existe es el causante de una monstruosa cantidad de suicidios y crímenes pasionales en todo el mundo. Para destruir esta celda el sujeto tiene que superar los celos, lo cual es enteramente posible al hacer consciente el problema, las conductas erróneas que trae aparejado y cómo es y actúa un celoso.


En primer lugar diremos que el celoso es siempre un perturbado mental y un pervertido sexual, que lleva una existencia aparentemente normal, y que en su trastorno tiende a amplificar o malinterpretar en su imaginación diversas actitudes o situaciones con su parea. Podríamos calificar al celoso como un "masturbador mental", que utiliza la imaginación y las emociones para procurarse placer de un modo desviado a través de imaginar diversos cuadros entre su pareja y el rival, situaciones ficticias que le producen simultáneamente dolor (por sentirse engañado) y exitación (al contemplar en sus fantasías los cuadros eróticos que imagina). El celoso es un masoquista que se procura placer uniendo la exitación al dolor, y esto es una perversión sexual.


Lo segundo que pondremos en descubierto es que siempre es narcisista. Se cree el centro del universo y piensa que el mundo, la gente y en especial su pareja solo existen para servirlo. El narcisismo es una conducta infantil que representa una fijación en las primeras etapas de desarrollo del niño. Se origina cuando el infante observa que la única realidad es la de su propio cuerpo, pensamientos y necesidades, ya que aún no siente el "YO" independiente del "tu" y no logra percibir que el mundo exterior existe en forma objetiva, sino que moldeando de acuerdo a sus propios procesos interiores. Para el narciso la pareja representa sólo un sirviente ideal, cuya servidumbre no se manifestará solamente en lo físico, sino también en lo imaginativo, en lo emocional, y en lo sexual.



Lo tercero que pondremos en descubierto es que el celoso es un individuo absolutamente inseguro de sí mismo, por carecer de confianza acerca de sus propios méritos, lo que lo lleva a temer en forma obsesiva que su parea pueda preferir a otro. Esta inseguridad, se debe a que el celoso generalmente es tímido, y esta timidez lo lleva a vivir angustiado ante rivales imaginarios o reales, con los cuales pudiera ser engañado.



En el punto cuarto diremos que el celoso siempre es un envidioso. La envidia es compañera de los celos, puesto que el sentir celos de un rival, real o imaginario, lo que hace es realidad es envidiar enconadamente lo que esa persona ha conseguido o podría llegar a tener.

Como punto quinto, diremos que el celoso se exita sexualemente en forma antinatural, como producto de una perversión de la fuerza de la libido. La libido es la energía el poder y la fuerza creadora de la vida, que implantada en el ser humano a la manera de un programa, obra impulsada por su propia fuerza directiva, rebasando el control voluntario. El sexo, lo erótico, la exitación sexual y los órgasmos generadores representan solamente una pequeña proción de la libido. En forma natural el sexo recibe una energía sutil que fluye desde la imaginación y lo emocional, de la cual se alimenta. Cuando se produce un ataque de celos, "se revierte" la trayectoria natural de esta energía, la que comienza a fluir ahora desde el sexo hacia la imaginación y lo emocional; energía de vibración mucho más densa, que provoca un verdadero cortocircuito al exitar a la persona en forma pervertida. Esto constituye una especia de masturbación mental, con gran desprendimiento de energía psíquica, de la cual se alimenta el vampiro que vive en esta celda.

En el punto sexto, diremos que el celoso es una persona destructiva, porque los celos siempre son destructivos. El sujeto celoso nunca piensa en crea algo nuevo para remediar la situación, como lo haría un amante no celoso, ya que en el corazón de un celoso sólo hay cabida para la venganza, el odio, el suicidio y el crimen. Nada de esto corresponde a quien asegura amar verdaderamente. Cuando existe verdadero amor, lo único que se pretende es evitar problemas y congojas a la persona amada, tratando de hacerla feliz por todos los medios posibles. Los celos destruyen siempre la relación de pareja en forma irreparable, y no son una prueba de amor como lo dice el programa del homo sapiens. Son exclusivamente producto del egoísmo y del infantilismo, que matan como un sutil veneno la comunicación, el equilibrio, la unidad y el amor de la pareja.

En el punto séptimo diremos que para vencer los celos es necesario ser consciente de la tensión magnética anormal entre los dos polos, representados por el hombre y la mujer. Es necesario evitar la polarización, perdida de la atracción magnética o vitalidad amorosa en la pareja, manteniendo una adecuada tensión magnética entre ambos amantes, lo cual se consigue siguiendo estas indicaciones:

a) Evitar el abuso de las relaciones sexuales, las que deben ser racionalmente dosificadas de común acuerdo.

b) No caer en la monotonía, el hábito, la obligación ni la mecanicidad en el acto sexual. Este debe realizarse conscientemente, y como corolario siempre de una profunda atracción amorosa, pensando siempre que es la culminación material de un proceso emocional y espiritual muy profundo a nivel de mundos internos.

c) Evitar el machismo. El machismo es el orgullo masculino, o vanidad de hombre producido por una sensación de superioridad sobre la mujer. Se basa en la creencia arcaica de que la mujer debería obedecer y reverenciar al hombre y que su papel estaría limitado a ser un objeto sexual destinado a la satisfacción de éste. Destruir el machismo significa comprender profundamente que la mujer tiene iguales derechos que el hombre en todo sentido, y por lo tanto sus actuaciones no pueden ser medidas con una vara distinta a la de los varones, como generalmente se hace.

d) Evitar la pérdidad de la individualidad psicológica de los amante. Esto significa que se debe evitar a toda costa la fusión de ambos mundos internos, los cuales pueden unirse , juntarse, pero jamas fundirse uno en otro, perdiendo la individualidad. Cada amante debe respetar el mundo interno de su compañero, donde viven sus pensamientos, sentimientos, deseos, defectos, gustos, metas, etc. etc. es decir, que debe respetar al compañero tal cual este es, sin tratar de convencerlo o arrastrarlo a la fuerza a pensar, sentir, desear o actuar como el mismo lo hace.


En el punto octavo y último, diremos que para vencer los celos es necesario aprender a tener fe y a confiar plenamente en la pareja. Este es el punto más importante, ya que por sí solo destruye de inmediato los celos para siempre. Aprender a tener fe significa aprender a amar, y el verdadero amor sólo aparece como resultado de una profunda y real comunicación entre la pareja. Si existe verdadera comunicación hay amor, si no hay comunicación sólo se está jugando al amor, y los celos pueden así aparecer en cualquier instante.

Llegar a comunicarse realmente consiste en abrir gradualmente el mundo interno, mostrando los problemas los conflictos, las metas y los más profundos sentimientos, pensamientos y deseos, para ir estableciendo a través de sucesivas conversaciones una relación franca abierta, en la cuan no se tema mostrarse y confiar plenamente en el compañero. Comprensión, armonía, continuidad, flexibilidad, tolerancia, franqueza y respeto mutuo son pilares fundamentales de una profunda comunicación de pareja, requisito único para lograr el verdadero amor, de donde nace la fe en la persona amada, fe que por sí sola es capaz de destruir al vampiro mas poderoso que vive en esta celda.

Finalmente me gustaría citar a un gran iniciado como lo fue sin duda Gibran Khalil Gibran:

"Pero que haya espacios en vuestra comunión,
y que los vientos del cielo dancen entre vosotros.
Amaos el uno al otro, pero no hagaís del amor una traba:
Que sea más bien un mar bullente entre las playas de vuestras almas.

Llenaos las copas el uno al otro, peron no bebáis en una sola copa.

Compartid vuestro pan, pero no comáis del mismo trozo.
Baiad y cantad juntos y sed alegres, pero permitid que cada uno pueda estar solo,
Al igual que las cuerdas del laúd separadas y, no obstante, vibran con la misma armonia.
Daos vuestro corazón, pero no es lo entreguéis en custodia.

Ya que sólo la mano de la Vida puede guardar vuestro corazones.
Vivid juntos, pero tampoco demasiado próximos,
Ya que los pilares del templo se erigen a distancia,
y la encina y el ciprés no crecen uno a la sombre del otro.
Y no penséis que podréis dirigir el curso del amor,
porque el amor, si os halla dignos, dirigirá él vuestro curso"

HOMBRE SOLAR
AGOSTO 2009